Sin Novedad en el frente (Estados Unidos, 1930)
«All so quiet in the western front»
Dirección: Lewis Milestone

Un veterano de la Primera Guerra Mundial escribe en 1929 sus memorias de la contienda, publicada tras el rechazo de 48 editores diferentes. Erich Maria Remarque (seudónimo de Erich Paul Remark) era un maestro y comerciante nacido en Osnabrück, Alemania en 1897, que gana notoriedad con su primera novela «Sin novedad en el frente». El texto desata la ira del nazismo, quien realiza quema pública de sus libros y, según el historiador Osvaldo Bayer, asesina a su hermana Elfriede Remark. El autor relata cómo a los 17 años las trompetas triunfantes del nacionalismo exacerban a los escolares, quienes se alistan sonrientes para una guerra que a los pocos meses les roba la alegría de vivir. La camaradería de las barracas, el virilismo estéril de los uniformes y las voces de mando, la crudeza de las luchas cuerpo a cuerpo y el rancio olor de los cadáveres putrefactos son testimoniados vívidamente, en primera persona, por un protagonista de primera línea de los acontecimientos, transmitiendo el horror escupido por las novedades tecnológicas estrenadas en la primera gran contienda mundial.

Apenas un año después de su publicación, los estudios Universal aceptan la propuesta del productor Carl Laemmie Jr. de realizar una versión cinematográfica, encargada a Lewis Milestone, bajo la propia asesoría de Remarque. La película es rodada en 17 semanas con un gran despliegue técnico, con la participación de más de 2.000 extras. Era la época del inicio del cine sonoro, realizándose dos versiones del film, una de ellas para las todavía populares salas de cine mudo. La recreación de los campos de batalla, en la que seres humanos se despedazan con sus bayonetas bajo el silbido de los bombardeos, es recreada con gran fidelidad. El uso inteligente de los planos y las cámaras sobre grúas, en los primeros desarrollos de esta técnica, lograron que como premio al realismo plasmado en el celuloide «Sin novedad en el frente» fuera galardonada en 1930 con dos premios Oscar (mejor película y mejor dirección).

La cinta ha perdido poco con el paso del tiempo, y como referencia del cine antibelicista ha heredado varios personajes arquetipo a las producciones que le sucedieron. Sin embargo hay quienes, como aspecto negativo, critican las irregulares curvas dramáticas de una propuesta de dos horas de duración, así como algunas sobreactuaciones -típicas del cine mudo- para una película que contaría con las bondades del sonido. En todo caso, la pantalla logra transmitir con fidelidad la esencia del texto original, repitiendo con ello la iracundia nazi que intentó boicotear su proyección por considerarla «antialemana».

Hay que resaltar que sus actores principales eran rostros desconocidos para la gran pantalla de la época. Lew Ayres, quien desempeña el rol estelar de Paul Baumer con tan sólo 20 años, alcanza fama internacional por su convincente interpretación de un escolar ansioso por protagonizar el canto de las arengas patrioteras. Ayres es profundamente influido por su participación en el film, hasta el punto de declararse objetor de conciencia, por motivos religiosos, cuando estalla la Segunda Guerra Mundial. Su postura casi cercena su carrera cinematográfica, debido al boicot de los productores por contratar a un sospechoso de «traición a la patria». Es así que se ve obligado a abandonar la popular serie televisiva Dr. Kildare, que protagonizaba junto a Lionel Barrymore. El actor, manteniendo su negativa a portar armas, posteriormente participa en la contienda como médico, aplacando los cuestionamientos en su contra.

La clara postura antimilitarista de «Sin novedad en el frente» también ocasionó problemas para su director Lewis Milestone. Posteriormente realiza sucesivas películas antibélicas a lo largo de su carrera, pero ni Edge of Darness (1943), A Walk in the Sun (1945), The Nort Star (1943), The Purple Heart (1944), Situación desesperada (Halls of Moctezuma, 1951), They Who Dore (1956), La cima de los héroes (Pork Chop Hill, 1959), poseen el impacto de la adaptación del texto de Remarque. Perseguido por el «Comité de Actividades Antinorteamericanas», Milestone se refugia en Europa, donde desarrolla una irregular serie de películas hasta su vuelta a Estados Unidos, cuando logra dirigir la versión de Motín a bordo (1962), con la actuación de Marlon Brando.

Sin Novedad en el Frente es un clásico film antimilitarista, restaurado en 1998, que no debe faltar en nuestra videoteca. Existe una accesible versión en DVD, con material adicional, que puede comprarse en tiendas, encontrarse en vendedores de películas copiadas o descargarse de la internet.